El potencial industrial de Castilla y León

Pero hay otras industrias. La industria láctea, la cárnica, la textil, la relacionada con metales pesados, etc. También, la industria de la creación automovilística o de la alimentación en general, donde de todas maneras incluimos las dos primeras que hemos mencionado. Que una comunidad autónoma invierta en industrias y en todo lo que conlleva, por ejemplo en maquinaria, en ingenieros industriales de Valladolid, o en naves industriales en Palencia es, sin duda, una apuesta con grandes posibilidades de ganar a medio y largo plazo. Por esa razón no podemos desdeñar el desarrollo industrial ni siquiera en la mal llamada España vaciada, ya que se vacía por algo.

En nuestro país tenemos un gran problema, y ese problema se llama centralización. Mientras que las zonas costeras, por ejemplo, viven casi exclusivamente de ese turismo, la capital parece acaparar todas las industrias. Las dos Castillas son un ejemplo claro de las consecuencias, ya que la mayor parte de las personas se ven obligadas a desplazarse a Madrid para labrarse un futuro, y lo mismo ocurre con comunidades como Canarias o Andalucía.

Pero solo en Castilla y León hay grandes profesionales, como los ingenieros de Palencia, y empresas proveedoras de máquinas y complementos industriales. Si los proyectos relativos a la industria se priorizaran en esta comunidad autónoma, con el tiempo las cosas serían distintas y no sería, ni mucho menos, una comunidad tan vaciada. Castilla y León, en definitiva, tiene mucho potencial industrial.