La página de cocina que más daño ha hecho al diseño web

La página de cocina que más daño ha hecho al diseño web
Era el segundo intento de Nuria, mi esposa, la primera vez había sido un desastre. En esta ocasión estaba convencida de que las tortitas le quedarían mejor.


La fe es lo último que se pierde.


La receta no era complicada, la única particularidad era que no llevaban harina, se hacían con plátano.


En el vídeo de Facebook el resultado era espectacular. Nada que ver con lo que le salió -en ambos intentos- a mi desesperada esposa.


"Pero qué co… si las he hecho exactamente igual que en el vídeo. No entiendo nada."


Yo estaba con el ordenador diseñando webs para SEO adulto. Le pedí que me enseñara el vídeo, era una receta de Tasty. 


Fin del misterio.


Por si no la conoces, Tasty es una página de Facebook con 100 millones de seguidores en la que te enseñan cómo hacer recetas deliciosas en vídeos muy cortos, de no más de cinco minutos.


¿Cuál es el problema de esta página?


Que no está pensada para enseñarte a cocinar, sino para que te quedes enganchado viendo una receta tras otra.


Esto es algo que a mi esposa no le entra en la cabeza. No concibe que el objetivo único de una página de recetas no sea enseñarte cómo conseguir el resultado que te muestran.


A mí me parece muy fácil de entender, pero me hago cargo de su frustración. No todo el mundo sabe lo mismo que tú y yo sobre marketing digital y venta de humo a granel.


Las recetas de Tasty -en apariencia- son deliciosas, rápidas y fáciles.


Ya sabes, de los creadores de:


"Pierde 10 kilos desde tu sofá mientras te hinchas a donuts, en 4 semanas."


"Crea una tienda de dropshipping que genere 3000€ al mes en solo tres meses, aunque no seas capaz de deletrear ni pronunciar dropshipping."


"Construye una web atractiva con Elementor, aunque el salón de tu casa sirva para grabar un episodio de Los Gipsy Kings".


Y en este último ejemplo es en el que me quiero centrar.


Cambia Elementor por Divi, Beaver Builder, Thrive Architect o el maquetador que quieras.


Todos juegan a lo mismo.


Facilidad y rapidez a la hora de conseguir un diseño profesional, aunque no sepas colorear sin salirte.


Arrastrar y soltar… fácil.


Cambiar los colores y las tipografías en un click… chupao.


Añadir animaciones molonas para que la web se vea más dinámica… pan comido.


Y si te atascas no te preocupes, que tienes decenas de plantillas prediseñadas para que no se note que de diseño sabes lo mismo que mi señora de repostería.


¿Resultado de utilizar estas herramientas?


Decepcionante en la mayoría de los casos.


¿Por qué?


Por que una cosa es que estas herramientas agilicen el proceso del diseñador, que lo hacen, y otra bien distinta es que sustituyan al diseñador.


A ver cómo te lo explico… en un horno de leña se puede hacer el tostón más tierno y jugoso del mundo… o dejarlo chamuscado por fuera y crudo por dentro.


Depende del cocinero, no del horno.


El mundo del diseño web está lleno de cocineros que no saben cocinar.


Raro, pero es así.


Por suerte se puede aprender a diseñar. ¿Dónde? Hay muchos cursos web. Pero no te fies de los que prometen webs en 2 horas


 


PD: ¿Quieres ser cocinero? Olvídate de compar juguetitos y aprende a cocinar. ¿Quieres ser diseñador? aprende a maquerar con Elementor.


 

FECHA: a las 11:34h (597 Lecturas)

TAGS: diseño web

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