¿Qué es un fleje de acero?

Si bien encontramos materiales diversos para fabricar flejes, los de acero son los más utilizados porque cuenta con las propiedades de resistencia a la fuerza de tracción y tensión que se requiere de ellos. Además, dependiendo de las aplicaciones, se pueden colocar de forma manual o con una máquina llamada flejadora para sellar el producto a proteger. Asimismo, hay cortadoras, tijeras, máquinas de embalaje, balanceadores, entre otros accesorios para sujetar correctamente el fleje.

Los flejes de acero vienen en bobinas o rollos para facilitar su aplicación; al seleccionarlos puedes elegir entre los pintados que suelen ser negros y retrasar el proceso de oxidación; pavonados, con los que se obtiene un tono azul debido a que al acero se le da un tratamiento térmico para que sean más resistente, pero no son muy efectivos contra la oxidación, por lo que se necesitará engrasar este tipo de flejes para evitar el contacto con la humedad; galvanizados son los más resistentes gracias a que se les da un recubrimiento con zinc.

Los flejes galvanizados poseen mayor dureza y resistencia que los anteriores, así como protección electroquímica por lo que pueden ser usados para una caja de registro electrico, ya que el zinc actúa como aislante de la electricidad y no se provocará un accidente al tener amarrados los cables. Además, gracias al recubrimiento se evita la corrosión y el daño ocasionado por el óxido.

Otros flejes de acero se fabrican con tratamientos térmicos de laminado en frío, que ofrecen una mayor resistencia a la tracción y a los golpes, por lo que se utilizan en las industrias de minería, petróleo y siderúrgica en aplicaciones muy pesadas y que requieren materiales de fabricación más duros.

Conocer las características y cualidades de un fleje de acero te será de ayuda cuando busques al proveedor más adecuado para las necesidades de tu negocio, así que antes de cotizar y adquirir un fleje, debes considerar las aplicaciones que se le darán, así como las condiciones ambientales para asegurarte de que no habrá riesgos o accidentes a causa de una elección inadecuada.