¿Sirve el uso de nicotina para dejar de fumar?

Dejar el hábito del tabaquismo es muy difícil, especialmente para las personas que fuman desde hace muchos años y que presentan dependencia al cigarrillo. En el mercado podemos encontrar tratamientos de reemplazo de nicotina con parches, vapeadores o chicles para ayudar a los fumadores a dejar ese mal hábito que merma su salud con cada bocanada, pero… ¿Realmente funcionan?


La nicotina es una sustancia dañina para la salud porque genera adicción; se incluye en chicles, parches de nicotina y líquidos para vapear porque, como tal, no son alternativas para dejar de fumar, sino para eliminar el consumo de otras sustancias perjudiciales para la salud, como el alquitrán, fenol, cresol, amoníaco y benceno, entre otras que se encuentran presentes en los cigarrillos convencionales.


Sin embargo, al igual que cuando se combate el consumo de azucar adictiva con sustitutos de azúcar como el aspartame, no se trata el problema real, sino que se sigue brindando la misma sustancia adictiva, pero en otra presentación que puede ser igualmente nociva para la salud.


En el caso de los vapeadores, el etanol es uno de los componentes del líquido para vapear. Su función es conservar sus propiedades. En estos productos se recomienda utilizar la nicotina vapear en diferentes proporciones, yendo desde una alta concentración hasta tener cero por ciento de contenido para dejar la adicción poco a poco, lo que facilita el proceso.


Sin embargo es muy importante tener cuidado con el consumo de nicotina, ya que es una sustancia dañina, con efectos secundarios y, en caso de recaer en el tabaquismo, puede provocar una intoxicación o sobredosis, por lo que se deben usar estos productos bajo vigilancia médica.


Diversos estudios han comprobado que los parches de nicotina, chicles y vapeadores únicamente son efectivos durante el periodo de abstinencia, que es cuando la mayoría de los fumadores recae, y que la probabilidad de que vuelvan a fumar después de haberlo pasado. De acuerdo con las investigaciones, el periodo de abstinencia dura seis meses, y la probabilidad de volver a fumar después de ese tiempo es más alta en las personas que usaron terapias de reemplazo de nicotina que en los que dejaron el cigarrillo por pura fuerza de voluntad.


Para que obtengas éxito en tu esfuerzo por dejar de fumar, la voluntad y el deseo de hacerlo son lo más importante, pues se trata de un hábito muy frecuente, que te acompañará toda tu vida al ver a familiares, amigos y desconocidos fumar. No es una misión imposible, es una decisión que cambiará tu vida y mejorará tu salud.

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