Cuando no puedes parar: ¿Tienes problemas con la comida?

Desde el Centro de Psicolgía Vículo, nos cuentan cómo, en muchos sentidos, la adicción a la comida es un problema de abuso de sustancias, al igual que el alcohol y las drogas. Las personas adictas a la comida son mental y fisiológicamente dependientes de la sustancia de la que abusan.

Como la mayoría de las adicciones, a menudo se debe a una sensación de pérdida de control de los eventos de su vida. Aunque saben que lo que están haciendo es malo para ellos, no pueden detener su comportamiento destructivo. A menudo, el adicto sufre de baja autoestima o puede estar sumergido en sentimientos de soledad y recurre a la comida para sentirse mejor. La edad y el sexo parecen no hacer ninguna diferencia con esta adicción, y todos parecen tener en común es la obsesión por la comida. A menudo, las personas se aíslan socialmente porque se sienten humilladas por su peso y creen que los demás las juzgan o sienten lástima por ellas.

¿Cómo saber si tengo un problema con la comida?

La adicción a la comida es tan grave como cualquier otra adicción y debe abordarse con la misma preocupación que le daría a un adicto a las drogas. Los efectos sobre la salud son definitivamente mortales y pueden causar problemas graves, como diabetes y problemas gástricos.

Este tipo de trastorno alimenticio se está convirtiendo en una epidemia en el mundo de hoy, y los centros como Vínculo, están comenzando a trabajar en programas y tratamientos para ayudar a estas personas.

En su página pueden encontrar más información sobre algunos síntomas que suelen presentarse  para ayudarlo a identificar si es posible que tenga una adicción a la comida.

Así como un alcohólico debe admitir que tiene un problema, quienes sufren de trastornos alimenticios también debe aceptar que tienen un problema. No hay una solución fácil, y será necesaria la dedicación del adicto para cambiar su estilo de vida y su forma de comer. Con un correcto tratamiento de ayuda psicológica y dietistas pueden comenzar a hacer los cambios necesarios que luego deberán mantenerse por el resto de sus vidas.

Debe tener en cuenta que esto no se puede hacer de la noche a la mañana y será un trabajo a largo plazo, pero sin duda lo ayudará a que tenga éxito.

Además, puede considerar recurrir a terapia de grupo. El éxito de estos programas es bien conocido y tiene millones de historias de éxito. Estos grupos ofrecen apoyo y aceptación incondicional. Aquí la persona tendrá la ayuda de otros que están librando la misma batalla y que entienden exactamente por lo que está pasando. Este puede ser un paso poderoso en el camino hacia la recuperación de la adicción a la comida.