Cómo elegir los cables eléctricos adecuados

Para llevar a cabo la elección de nuestros cables, lo primero que tenemos que saber es que, por lo general, toda instalación eléctrica constará al menos de 3 cables eléctricos, por un lado, tenemos el cable de fase, que es el cable conductor de electricidad que lleva la electricidad desde la caja de conexión, a la toma de corriente o interruptor (mecanismos) donde se necesita, suelen ser de color marrón, gris o negro. Por otro lado, tenemos el cable neutro, que sería el encargado de devolver la corriente al sistema, generalmente es de color azul. Por último, tenemos el cable de tierra, que sirve como método de seguridad, para evitar descargas a las personas o a los aparatos eléctricos conectados a la instalación. Se encarga de canalizar las derivaciones de corriente del sistema hasta la pica de tierra, generalmente se trata de un cable de dos colores (amarillo y verde).

Una vez tenemos claro lo anterior, deberemos tener en cuenta el consumo habitual de energía eléctrica que haremos a través del cable, y el amperaje previsto que soportará, teniendo en cuenta el uso deberemos elegir cables de mayor o menor sección (grosor del cable), por ejemplo:

Para iluminación y pequeños aparatos eléctricos como ventiladores o pequeños ordenadores, utilizaremos cable de 1,5 mm de sección, para pequeños electrodomésticos podemos utilizar cables de 2,5 mm y para horno y cocina o para el aire acondicionado podemos utilizar cable de 6 mm de sección.

Una vez elegida la sección de nuestro cable, tendremos que elegir la cantidad de cable que vamos a utilizar, para ello es importante realizar mediciones previas de la habitación o el lugar en el que tenemos previsto ubicar los cables, y además comprar siempre algunos metros extra, por si hubiera imprevistos.

Otra característica de los cables eléctricos que debemos tener en cuenta a la hora de elegirlos es la rigidez del cable, en el mercado hay de ambos tipos dependiendo del uso que vayamos a darle, la rigidez depende del número de hilos que conforman el conductor central, a mayor cantidad de hilos mayor flexibilidad. El cable flexible es especialmente interesante para instalaciones encastradas en la pared, por ejemplo, dentro de canalizaciones de tipo tubo corrugado, los cables flexibles ayudan en posibles codos y curvas que encontraremos dentro de la pared.

Otro aspecto a tener en cuenta es si nuestro cable estará en una instalación interior o al aire libre, si vamos a mantener nuestros cables eléctricos en el exterior, deberán contar con una cubierta lo suficientemente resistente para mantener su correcto estado de conservación y proteger frente a la humedad, las inclemencias del tiempo y los animales. Muchas veces será la canalización utilizada para el cable, por ejemplo, tubo corrugado la que desempeñará el papel más importante en la protección del cable.

Por último, es importante conocer la nomenclatura de los cables para entender la información impresa generalmente en la cubierta del cable y que nos informa de la normativa seguida, la tensión máxima, el tipo de aislamiento, la forma del conductor, el número de conductores y la sección de los mismos. Esta información detallada podrá encontrarla en nuestro blog corporativo.