Reino Unido: Territorio de los grandes beneficios y bajos impuestos

ü  Bajo costo de formación y administración, los requisitos legales son simples, al igual que los requisitos reglamentarios.

ü  Exención de impuestos en el Reino Unido con el pago de dividendos extranjeros. las ganancias obtenidas por la venta de acciones en una subsidiaria en el extranjero también pueden estar exentas de impuestos.

ü  Una Sociedad de cartera del Reino Unido es una sociedad ordinaria que se inscribe en el ámbito de la legislación fiscal general y, por tanto, se beneficia de los tratados de doble imposición y de las directivas fiscales europeas.

ü  No hay impuesto a las ganancias de capital sobre los accionistas no residentes, con ganancias de la venta de acciones en una sociedad de cartera inglesa.

ü  Ausencia de impuestos al pagar dividendos a los accionistas.

La clave para que la constitución de una empresa  sea lo más fácil posible es contratar a un agente profesional. Le llevará de la mano, paso a paso durante todo el proceso, asegurándose de  que la empresa sea constituida correctamente para evitar obstáculos administrativos y multas innecesarias en el futuro.

Tenga en cuenta que los propietarios de las compañías offshore en el Reino Unido estarán disponibles para el público. Además, esta jurisdicción se decidió en establecer un registro abierto de empresas que refleja los datos de los propietarios y beneficiarios de empresas establecidas no solo en el Reino Unido, sino también en los territorios de Gran Bretaña y en el extranjero.  

En cuanto a la fiscalidad e impuestos, los residentes del Reino Unido pagan un impuesto sobre las ganancias de capital a una tasa del 18% o 28%, dependiendo de si son contribuyentes de tasa básica o superior. Esta jurisdicción no aplica impuestos sobre las ganancias de capital por la venta de activos situados en el Reino Unido por parte de no residentes.

No impone retenciones en origen sobre la distribución de dividendos a accionistas o empresas matrices. Esto es independientemente del lugar del mundo en el que resida el accionista.

No existe un impuesto sobre las aportaciones sobre el capital social desembolsado o emitido. Sin embargo, el derecho de timbre al 0,5% se paga en transferencias posteriores.

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