Sant Just Desvern se queda sin concesionarios de bares
La población catalana de Sant Just Desvern, con una renta per cápita sólo superada por el enclave de Pedralbes, se va quedando sin tejido social.
Paulatinamente han ido cerrando sus puertas casi todas las concesiones municipales de bares y restaurantes.
El pasado día 30 de noviembre cerró sua puertas el restaurante de la Biblioteca Maragall, que contaba con uns espléndida terraza en la plaza del mismo nombre.
El Parque del Milenari, hace años que espera inqulino, y el bucólico rincón de la Illa Walden se encuentra en un tris, debido a las intempestivas obras por parte del Ayuntamiento, que han arruinado la temporada de cenas de empresa y celebraciones navideñas.
El famoso edificio diseñado por Ricardo Bofill, puede perder uno de sus encantos, manifiesta la dirección del restaurante La Vagoneta. Definitivamente Sant Just, se va convertir en una ciudad dormitorio, es una lástima que el propio ayuntamiento obstaculice los actos culturales y lúdicos que teníamos previstos, y no mime a sus propios colaboradores
El edificio Walden 7, es un icono internacional, y recibe visitas organizadas de universitarios de todo el mundo.
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TAGS: Sant Just Desvern
AUTOR: L. M Braup
EN: Tiempo libre