Naturales o ecológicos

El uso de piedra reconstruida forma parte de la construcción ecosostenible. Mientras que para extraer piedra natural es necesario realizar excavaciones especiales y utilizar un recurso agotable, la piedra artificial se obtiene con un proceso industrial similar a la producción de tejas. Crea una mezcla de materiales como arcilla, arena y grava unidos por cemento o yeso. Para dar el color a la piedra también se añaden pigmentos o se utiliza polvo de piedra natural. Luego la mezcla se introduce en moldes que reproducen la textura de la piedra y se pueden cocinar o secar con la Venta de Piedra Natural al por mayor.

La piedra natural, en cambio, constituye un valor añadido para una vivienda particular o para estancias destinadas a otros usos.

Aplicaciones de la piedra reconstruida

La piedra reconstruida se utiliza exclusivamente como revestimiento decorativo de paredes o como suelo.

Para que sea posible su instalación en exteriores se debe utilizar como conglomerante un material como el cemento, material que asegure la resistencia a los agentes atmosféricos.

Los productos que contienen yeso, mucho más ligeros, sólo son aptos para ambientes internos ya que son mucho más porosos.

Por tanto, el uso de este tipo de material es bastante limitado.

Instalación y mantenimiento

La aplicación de la piedra reconstruida es bastante sencilla ya que se utiliza la instalación en seco, para lo cual basta con pegar los paneles al soporte y realizar las juntas con estuco. El bajo peso de esta solución resulta ventajoso respecto al de la piedra natural, incluso con el mismo espesor.

Ambas soluciones no requieren mucho mantenimiento, basta con una limpieza para eliminar el polvo y la suciedad mediante un cepillo o escoba. Para la suciedad más rebelde del exterior, también se puede utilizar un limpiador de alta presión para limpiar una pared de piedra natural, lo que no se recomienda para piedra reconstruida.