Los espacios de coworking: de refugio para startups a aliados estratégicos de las grandes empresas

La transición hacia un modelo empresarial

El éxito de los coworking radica en su capacidad de adaptación. Hoy, el 70% de los usuarios de estos espacios son grandes empresas que han reconocido el valor de externalizar el diseño y la gestión de sus entornos laborales. “El modelo space as a service está marcando una nueva era”, afirmó Fernando Ramírez, director general de LOOM, durante un foro sobre espacios flexibles. Esta modalidad permite a las empresas disfrutar de oficinas personalizadas, con todos los servicios incluidos en un solo paquete, delegando tareas logísticas y operativas en operadores especializados.

LOOM, una de las empresas líderes del sector en España, ejemplifica esta tendencia. Con 15 centros distribuidos entre Madrid y Barcelona, su apuesta por el diseño flexible y sostenible les ha permitido consolidar su posición en el mercado. La compañía planea inaugurar el coworking más grande del país, LOOM Azca, con una superficie de 9.000 metros cuadrados. Este proyecto no solo pone de manifiesto el potencial del sector, sino también la importancia de los estándares ESG (Ambiental, Social y de Gobernanza) en su gestión.

Networking y bienestar: más que un espacio de trabajo

Una de las claves del éxito de los coworking es su capacidad para generar entornos que fomenten la interacción profesional y el bienestar de sus usuarios. “Son espacios donde las ideas fluyen y se crean sinergias”, explicó Borja Marinas, CEO de PATIO Campus, un hub de innovación en Madrid gestionado por LOOM. Estas oficinas no se limitan a ofrecer salas de reuniones y despachos, sino que incluyen zonas comunes, áreas de descanso, una pared plegable para adaptar ambientes, y espacios al aire libre que propician el networking.

El bienestar también es un factor prioritario. Actividades como clases de yoga, talleres de formación y conferencias temáticas son parte de la oferta de valor que las empresas de coworking presentan a sus clientes. Esta combinación de trabajo y esparcimiento mejora la experiencia laboral y refuerza el sentido de comunidad, algo que resulta atractivo tanto para empresas como para empleados.

Un impacto urbano transformador

Cristina Castelao, Senior Workplace Manager para Europa de la empresa tecnológica Onetrust, vislumbra un escenario en el que los espacios de coworking contribuyan a una descongestión de los grandes núcleos urbanos. “La colaboración entre empresas y coworkings podría redistribuir el uso de oficinas por la ciudad, reducir el tráfico e incluso bajar el precio de la vivienda”, indicó. Aunque este planteamiento aún es teórico, subraya el potencial de los coworking para reconfigurar el tejido urbano y fomentar una mezcla de usos más sostenible.

Actualmente, el mercado español se encuentra en una fase inicial de desarrollo, con una penetración del 3% en Barcelona y el 2% en Madrid, cifras que contrastan con el 10% de Londres o el 8% de París. Este margen de crecimiento representa una oportunidad significativa para el sector, especialmente si se tiene en cuenta el cambio cultural hacia modelos de trabajo híbrido.

Casos de éxito: LOOM y PATIO Campus

LOOM ha sido clave en la implementación de soluciones personalizadas para grandes empresas como Sanofi y Microsoft, que han encontrado en estos espacios una alternativa flexible y sostenible para sus operaciones. “Ofrecemos un servicio integral, desde el diseño del espacio hasta la gestión diaria”, destacó Ramírez.

PATIO Campus, por su parte, representa una propuesta única en España. Fundada por corporaciones como BMW, Inditex y L’Oréal, esta asociación privada sin ánimo de lucro busca centralizar el conocimiento y fomentar la cocreación. Su éxito radica en la accesibilidad que ofrece a startups e inversores, así como en sus programas de mentoría y talleres que promueven la innovación disruptiva.

El coworking como herramienta de crecimiento empresarial

Los operadores de coworking no solo ofrecen espacios físicos, sino también herramientas para el desarrollo de negocios. La flexibilidad de los contratos, que pueden ir desde días hasta años, permite a las empresas adaptar sus necesidades a la evolución de su actividad. “La capacidad de crecer, reducir o modificar los espacios en función de nuestras necesidades es un factor decisivo”, señaló Castelao.

En este contexto, el coworking se posiciona como una solución integral que combina tecnología, sostenibilidad y diseño para ofrecer experiencias laborales enriquecedoras. A medida que más empresas adoptan este modelo, el futuro de los espacios de trabajo parece estar marcado por la colaboración y la adaptabilidad.

Un sector en expansión con retos por delante

A pesar de su rápido crecimiento, el sector enfrenta desafíos. La necesidad de adaptarse a un mercado en constante evolución exige innovación continua y una gestión eficiente. Además, la competencia con oficinas tradicionales y la penetración limitada en algunas ciudades plantean barreras que los operadores deben superar.

Sin embargo, las perspectivas son optimistas. Con iniciativas como LOOM Azca y PATIO Campus, España está en camino de consolidarse como un referente en el mercado de espacios de trabajo flexible. La combinación de tecnología, diseño y sostenibilidad, junto con un enfoque en el bienestar y la colaboración, asegura un futuro prometedor para esta industria en plena transformación.