Las remesas en la era de la migración: desafíos y soluciones

Madrid, 27 de febrero de 2025 – En un mundo cada vez más interconectado, el fenómeno de las remesas está cobrando una relevancia sin precedentes. Para millones de migrantes, enviar dinero a sus países de origen no solo es un acto de solidaridad familiar, sino también una forma de contribuir al desarrollo económico de sus comunidades.

Sin embargo, este proceso está lejos de ser sencillo. Altas comisiones, tiempos prolongados de transferencia y limitaciones tecnológicas son solo algunos de los desafíos que enfrentan los usuarios.

Según datos del Banco Mundial, las remesas alcanzaron un récord de 626 mil millones de dólares en 2022, representando una fuente vital de ingresos para los países en desarrollo. Estas transferencias superan en muchos casos la inversión extranjera directa y la ayuda internacional, constituyendo un pilar para las economías locales.

En 2023, las remesas hacia América Latina y el Caribe alcanzaron un récord histórico de 155.000 millones de dólares, lo que representa un crecimiento del 9,5 % respecto de los 142.000 millones registrados en 2022, de acuerdo con datos del Banco Interamericano de Desarrollo (BID). Este avance refleja no solo un aumento significativo en los flujos migratorios hacia y desde la región, sino también la resiliencia de los migrantes frente a contextos económicos adversos, como la inflación global y las perspectivas económicas limitadas.

A su vez, el número de migrantes latinoamericanos en Europa creció en los últimos años, alcanzando casi 3,7 millones de nuevos permisos de residencia emitidos en 2022 en la Unión Europea. España, Italia y Portugal se han consolidado como destinos preferidos, debido a su proximidad cultural y lingüística, así como a las oportunidades laborales que ofrecen.

Una dinámica compleja

No obstante, el crecimiento sostenido de las remesas y los flujos migratorios pone en evidencia las limitaciones de la infraestructura financiera global. Según la OIM, muchos migrantes enfrentan barreras para acceder a cuentas bancarias tradicionales debido a la falta de documentación, permisos de trabajo y otros requisitos legales, lo que incrementa los costes de envío. En el segundo trimestre de 2023, el coste promedio de enviar 200 dólares a América Latina y el Caribe fue del 6,1%, un porcentaje que, aunque disminuyó en las últimas décadas, sigue siendo un obstáculo importante para las poblaciones más vulnerables.

Estos déficits responden a una realidad, no a una fatalidad. Detrás de saber que el crecimiento del mercado de remesas viene impulsado por el aumento de los flujos migratorios, se esconde una dinámica compleja.

Estos movimientos de personas suelen estar marcados en ocasiones por guerras, crisis económicas y otras situaciones adversas que obligan a millones a buscar mejores oportunidades en otros países. En muchas ocasiones no hay un plan, la decisión de emigrar se impone a cualquier otro proyecto. Este fenómeno desborda las estructuras jurídicas, políticas y económicas existentes, dificultando que la migración se traduzca en un aporte positivo a las economías receptoras y en una experiencia inclusiva para los propios migrantes.

Inmigrar no debería ser, al menos en términos financieros, un calvario que agote las energías de quienes buscan integrarse y contribuir con su trabajo. No obstante, una de las principales barreras para alcanzar esta meta es la infraestructura financiera de pagos, que requiere adaptarse y evolucionar para abordar los problemas específicos que enfrentan los inmigrantes. Muchas de estas dificultades, como la imposibilidad de obtener permisos de trabajo o documentación adecuada, tienen repercusiones directas en su capacidad para acceder a la banca tradicional, perpetuando un ciclo de exclusión que afecta tanto su bienestar como su capacidad para generar aportes económicos significativos.

Las tecnologías digitales como aliadas

La era digital está comenzando a transformar radicalmente este panorama. La combinación de soluciones financieras innovadoras y tecnología blockchain está facilitando transferencias más rápidas, seguras y económicas, lo que iguala las condiciones del juego y ofrece alternativas más accesibles. Por ejemplo, BNKA utiliza contratos inteligentes que permiten transacciones inmediatas sin intermediarios, simplificando los procesos de transferencia y reduciendo costes significativamente.

La historia de una trabajadora doméstica peruana de 56 años, que tras cinco años en España logró abrir su primera cuenta bancaria en Europa gracias a BNKA, destaca el impacto emocional y la importancia de estas soluciones en la vida de los migrantes. La alegría y sorpresa que sintió al descubrir que podía enviar dinero directamente a la cuenta de su familia en Perú desde su casa, fue un momento realmente conmovedor.

Con el compromiso de crear un futuro financiero más inclusivo, BNKA adapta sus productos y servicios para ayudar a millones de personas a integrarse fácilmente en la economía global. Más que soluciones financieras, BNKA ofrece puentes hacia nuevas oportunidades para aquellos que están lejos de casa. En un mundo aún dividido por barreras físicas y económicas, esta plataforma emplea la innovación para unir necesidades reales con oportunidades tangibles. Cada transacción es un paso hacia cerrar estas brechas, mostrando cómo la tecnología puede ser una fuerza positiva para todos.

Sobre Bnka

Bnka es una fintech global que ofrece soluciones financieras para migrantes latinos en Europa, permitiendo transacciones en euros, pesos argentinos, soles y otros activos digitales.  Además, ofrece una variedad de servicios, incluyendo el intercambio de monedas, tarjetas internacionales, pagos de servicios y recargas de móvil. Esto ayuda a los usuarios a integrar su economía actual con la de su país natal. Con una presencia consolidada en Argentina, Perú y la Unión Europea, Bnka tiene planes de expandirse a Colombia en el primer semestre de 2025, reafirmando su compromiso con la inclusión financiera global.

Para más información sobre BNKA, visite bnka.com y siga su cuentas en Instagram, LinkedIn, X y YouTube.

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