Todo lo que debes saber sobre la gestión de calidad y un QMS

Un ejemplo de ello es la actual norma ISO 9001, que exige a las empresas el cumplimiento de ciertos procedimientos que aseguran la calidad de sus procesos y productos, y que supone un rasgo diferencial de calidad y compromiso para aquellas empresas que poseen su validación.

Los sistemas de calidad o QMS como el software ShareME, son vitales para las empresas ya que integran aquellos procesos internos de una compañía, proporcionando una visión total sobre los procesos que garantiza la correcta ejecución de los proyectos.  Gracias a ello, las empresas son capaces de identificar, gestionar y mejorar sus procesos de negocio.

A continuación, mostramos algunos ejemplos para ilustrar el concepto de “gestión de calidad” y porque es necesario contar con un software QMS para llevarla a cabo con la máxima eficiencia.

-Un sistema QMS detecta aquellos requerimientos externos referentes a la calidad necesarios para obtener las licencias comerciales pertinentes.

-Absoluta seguridad de que las demandas sobre los procesos de calidad han sido registradas en el lugar adecuado dentro del sistema de gestión.

-Seguridad de entregar a los trabajadores de la formación necesaria para mantener y desarrollar sistemas de calidad.

-Implantar y mantener un registro conforme el sistema cumple con las normativas de calidad.

-Monitorización y análisis constante sobre el cumplimiento de requisitos y confirmación de que los cambios en los procesos se han almacenado correctamente.

-Auditorias y análisis sobre todos los procesos de calidad, con opción a correcciones cuando sea oportuno. Y mejoras continuas en el sistema global de calidad.

Sin embargo y pese a la multitud de definiciones existentes para presentar este tipo de software, todas ofrecen una máxima común; el uso de uno de estos sistemas permite automatizar un gran número de procesos, cuantificando las acciones, lo que lleva a las empresas a experimentar una mejora constante reflejada en un aumento de la calidad y la productividad.

Se trata de un elemento integrador que recorta las distancias entre los distintos departamentos de una empresa, con el objetivo común de finalmente, disponer de los mejores productos bajo altos y exigentes estandards de calidad. Las empresas, lejos de ver la incorporación de este tipo de software como un importante esfuerzo económico, ya reciben estos softwares centrados en potenciar la calidad de sus productos y procesos, como un elemento indispensable para obtener el mayor rendimiento posible de su actividad y mantener una cultura de empresa centrada en la máxima eficiencia.